Una noche que comenzó con la aparente tranquilidad de un sábado se transformó en un violento episodio en el barrio Santa Rosa de Juan Bautista Alberdi, donde una discusión vecinal terminó a los tiros, dejando como saldo un hombre herido de bala y otro detenido.

De acuerdo al informe oficial brindado por fuentes policiales y judiciales, todo comenzó por un incidente menor, protagonizado por un niño de 8 años, hijo del posterior agresor. El pequeño habría arrojado una piedra hacia un hombre de 45 años que se encontraba sentado en una plazoleta del barrio.

Lo que parecía un hecho sin mayores consecuencias escaló rápidamente. Según la primera versión de los hechos, el adulto —visiblemente molesto— habría intentado reprender o incluso agredir al menor, lo que provocó la intervención inmediata del padre, un hombre de 49 años, quien extrajo un arma de fuego y le disparó al otro en una pierna.

El sonido del disparo alteró la calma del vecindario. Vecinos alertaron de inmediato a las autoridades, mientras la víctima caía herida al suelo. Minutos después, personal de los Bomberos Voluntarios de Alberdi acudió al lugar para brindar los primeros auxilios y contener la situación. Posteriormente, el herido fue trasladado por servicios de emergencia médica a un centro de salud de la zona, donde permanece bajo observación y atención médica.

El presunto autor del disparo fue aprehendido por efectivos de la policía local y puesto a disposición de la Fiscalía de turno del Ministerio Público Fiscal, que tomó intervención directa en el caso.

Dos versiones enfrentadas

Aunque la versión inicial apuntaba a una reacción desmedida del padre del niño, un familiar del acusado ofreció un relato distinto que busca contextualizar el hecho. Según su testimonio, el conflicto se habría originado cuando “otro niño le tiró una piedra al tal ‘Bobo’ (apodo con el que se refieren a la víctima)”.

De acuerdo con este testimonio, el hombre herido habría reaccionado de manera violenta:

“Se bajó de la moto, golpeó al nieto del supuesto agresor y luego intentó atacar a la madre y la abuela del niño”, relató el familiar.

Fue en ese momento —siempre según esta versión— cuando el hombre de 49 años habría sacado el arma y efectuado el disparo, intentando defender a su familia de lo que percibía como una agresión.

Investigación en curso

Las autoridades del Ministerio Público Fiscal y de la Comisaría local trabajan intensamente en la reconstrucción de los hechos. La Fiscalía de turno dispuso la realización de pericias balísticas, la recolección de testimonios y el análisis de cámaras de seguridad de la zona para esclarecer el contexto exacto en que se produjo el disparo.

Fuentes del caso confirmaron que el arma de fuego fue secuestrada, al igual que otros elementos de interés para la causa, y que el detenido permanece a disposición de la Justicia mientras se avanza en la calificación legal del hecho, que podría ir desde “lesiones graves agravadas por el uso de arma de fuego” hasta una posible “legítima defensa”, dependiendo de lo que arroje la investigación.

El violento episodio volvió a poner sobre la mesa la preocupación por la escalada de conflictos vecinales en la zona y la presencia de armas de fuego en ámbitos domésticos, un tema que las autoridades vienen observando con atención en distintos barrios del sur tucumano.

Mientras tanto, el barrio Santa Rosa sigue conmocionado. Los vecinos aseguran que “nunca se había visto algo así” y que el clima de tensión aún se percibe en las calles.
La Justicia, por su parte, espera contar en los próximos días con los informes médicos y las pericias forenses que permitan definir responsabilidades y determinar si la agresión fue una reacción impulsiva o un acto de defensa en el marco de un conflicto vecinal que escaló de forma trágica.